Día de mucho viento, muchísimo, aquí en Reus es bastante habitual, cuando sopla lo hace con intensidad, y por ese motivo no he madrugado hoy para salir a correr.
Con otras obligaciones de por medio, he sentido la necesidad de hacer un break al mediodía, calzarme las zapatillas y salir a entrenar sea como sea, disponía de una hora en total, así que ha sido corto pero muy intenso.
Me he acercado hasta uno de los paseos, el de la Av. de la Ciencia, que se está convirtiendo en uno de esos puntos para entrenamientos exprés (cuando no cuento con la pista de atletismo) o cuando simplemente quiero trotar un rato sin alejarme demasiado de casa…
Corriendo con viento en contra no puedes esperar demasiado, no puedes pretender rebajar ninguna marca y lo único que tienes que hacer es esforzarte en seguir, paso a paso tratando de que precisamente el viento no te acabe desplazando, obviamente el paseo tiene dos sentidos, la ida con viento a favor y la vuelta en contra, lo que es más o menos 1km. por cada tramo.
Así que he comenzado en plan fuerte, me empujaban, y tan solo tenía que mantener el tipo, pero la vuelta, ahí es cuando se nota realmente que tienes que esforzarte de verdad por conseguir llegar al final.
No esperaba mucho de la salida de hoy, simplemente que me sirviera para desconectar y así ha sido.
Dos km. con todo a favor y otros dos con todo en contra se podría decir que a pesar de haber completado un entreno tan corto, hacerlo en esas condiciones, por duro que parezca, solamente trae ventajas, cuando haga buen tiempo seguro que recordaré momentos así y si por desgracia en alguna carrera hay problemas de este tipo, entonces recordarás que ya lo has preparado antes, y todo será mucho más fácil.