Gimnasio y entrenamiento en pista (caminar y muy poquito corriendo)

Cuando estás lesionado el auténtico riesgo es paralizar toda actividad física hasta el punto de no hacer nada, a menos que la lesión suponga una inmovilización total, lo ideal es intentar mantener las sesiones, aunque con actividades distintas si es necesario.

Hoy he querido probar, tras unos días sin dolor, de mucho «relax», de estar de vacaciones, le he añadido al gimnasio un poco de «running» pero en plan muy muy light.

Básicamente me he limitado a caminar por la pista, pero concluir los últimos metros de cada vuelta corriendo, de manera que ese único tramo tenía suficiente para quitarme la espinita, y ver si dolía o no, y esta vez no he tenido molestias…

A seguir mejorando a la espera de lo que me cuente el traumatólogo con la resonancia.

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