Hoy he vuelto a correr, lo digo con la boca grande, no he hecho una vuelta, ni dos, no ha sido un poco de calentamiento y al gimnasio, ha sido una sesión de running en pista, por fin, tras meses sin correr por culpa del menisco.
Poco a poco voy recuperando la normalidad, aunque sigo con algún que otro run run, molestia en la rodilla izquierda, tras la resonancia, menisco interno y a falta de la visita del traumatólogo la semana que viene, voy notando mejoría, sobre todo tras pasarme estos meses haciendo ejercicio en el gimnasio y bicicleta estática en casa.
Pero volver no será fácil, noto que he perdido la forma, que no estoy a tope, y las sensaciones de la bici, que está bien, no tiene nada que ver y no es comparable con correr, supongo que tiene la culpa de ello el no ver la cantidad de km. que recorro, por lo menos en la bici que tengo en casa no funciona el display.
A final de mes, de año… vuelve la San Silvestre de nuevo, ya me inscribí, en un acto de enajenación, de locura absoluta diría yo, sabiendo que es posible que no pueda participar, que a veces depende de otros factores, pero si puedo hacer algo en estas semanas que quedan para estar, así será.
Y es que ahora más que nunca, cuando más «jodido» estás, es cuando hay que demostrar lo fuerte que eres, y esa fortaleza no es física, es más bien mental, y comienzo mi espectacular remontada estos días.
El objetivo esta vez es muy básico, acabar los 5Km. de la San Silvestre de Reus, ni más ni menos, estar ahí, tomar la salida y dejarme llevarme llevar, esta vez sin importante tanto el cronómetro, no tanto como otras veces, no tanto como en el pasado.
Me queda mucho running por delante, pero puede que esta vez tenga que se consciente de que mi objetivo personal no es ir más rápido cada vez y tenga que pensar en otras metas, acepto el reto.
