La intención era hacer una especie de simulacro de carrera, con intención firme de preparar la Cursa de L’Espluga.
Aunque soy consciente de que la carretera que va de Pallaresos a Tarragona, y volver, no es exactamente como el circuito de la carrera, sí sé que correr a las 18:30, con mucha calor y humedad, será en parte parecido a lo que me encontraré de aquí a 20 días.
Claro que normalmente en L’Espluga no hay tanta humedad.
Me ha costado mucho hacer el recorrido, ha sido muy duro, y creo que voy a tener que hacer un esfuerzo grande, ya se sabe aquello de «esto va a costar, y no será fácil», pero prefiero decir «esto va a costar, no será fácil, pero lo conseguiré» , aunque lo de hoy ha sido un entrenamiento de echarle narices, un recorrido de 1 hora y 3′ corriendo, serán unos 14 km., pero podrían haber sido más, si no hubiera hecho algo del recorrido caminando en la vuelta, porque ahí creía que me daba algo con tanta calor.
Creédme, ha sido muy duro, pero estoy convencido que si quiero ponerme en forma, no puedo bajar los brazos este verano, por unos grados más de temperatura.
El año pasado ya estuve parado con la excusa del calor, y la verdad, no sé que es peor, si salir a trotar, o quedarse en casa, yo desde luego prefiero lo primero, y no hay que olvidar que en septiembre quiero regresar a las pistas del Club de Atletismo en Tarragona, aunque sea para entrenar allí una semana sí y otra no (por temas laborales, claro).
Como siempre, después de un entreno como el de hoy, una buena sesión de isotónica y de agua fresquita, que es un auténtico placer, (y en verano más) aunque se me ha acabado la isotónica, y he tenido que recurrir al clásico truco de la Runner’s World, el de hacerme un vaso con agua, limón, azúcar y bicarbonato.