Comienzo el mes de marzo esperanzado y contando los días para el regreso al running, que todavía deberá esperar un poco.
No hace todavía dos meses de la operación y por tanto debo esperar y ser prudente, siguiendo siempre las indicaciones médicas.
Aunque el cuerpo me pediría salir a correr tal cual, sé que eso puede ser contraproducente.
El caso es que me preocupan, lo de preocupar es un poco un decir, varias cosas, la primera una recaída o hacerme daño en la zona de la malla, la segunda que al volver a hacer deporte, correr, me note en un estado de forma no demasiado bueno.
Por tanto antes de que por fin pueda de nuevo darle al running, creo que es una idea genial intentar mantenerme activo.
De momento me desaconsejan tanto elíptica como bicicleta, debido al esfuerzo abdominal de ambos, especialmente conociéndome como me conozco, que podría meterle mucha caña y por tanto poner en riesgo la recuperación.
Lo que sí puedo hacer es caminar, y aunque no sea salir a trotar o a correr, al menos me quito un poco la espinita.
Hoy he ido a caminar y creo que igual hasta demasiado y todo, he estado dos horas por ahí, y esta vez he apostado por terrenos rurales también, con cuestas y bajadas…
Todo iba bastante bien, pero tras dos horas no me he sentido a gusto, y aunque no dolía, la zona de la malla se notaba, también tengo que decir que llevo la típica riñonera para correr con el móvil dentro, y que puede que entre unas cosas y otras lo notara más precisamente en esa zona, que está sensible tras la operación.
Ahora a ver qué tal me siento para ir repitiendo, aunque seguramente optaré por menos distancia o al menos terrenos más llanos…