Viendo amanecer en la pista de atletismo

El running de por sí te trae experiencias que son increíbles, hay detalles y matices que solamente puedes disfrutar si madrugas, y no ha sido por gusto, es lo que tiene la conciliación familiar…

A las 7 de la mañana, con un frío intenso, a un grado…, que unido a la humedad no era precisamente lo más agradable para correr.

Tapadísimo, con tres capas y con pantalón largo y con el handicap de no haber cargado el reproductor mighty (así que sin música), vuelta a vuelta, he ido construyendo, lento, 4 km., a los que le he añadido un par más, a ritmos más alegres…

La jornada comenzaba sin luz, a oscuras, y entonces ves amanecer en la pista de atletismo, así doy inicio a mi lunes y a mi semana, a pesar de lo de la música, de manera espectacular, he cargado las pilas y tengo energía de sobra…

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