No hay nada en la vida, sobre todo si eres corredor, que sea comparable a finalizar un maratón, puedes participar en carreras de diferentes distancias, pero cuando lo haces sobre la mítica distancia de los 42 Km. sabes que realmente es diferente a todo lo que habías hecho antes.
Hablando de personajes míticos, Emil Ztopek ya decía aquello de «Si quieres correr, corre una milla. Si quieres experimentar una vida diferente, corre un maratón « y por mí es una de esas citas categóricas con las que comulga.
El maratón es el gran objetivo, ya estuve a punto de terminarlo en 2008 (me quedé en el Km. 30, pero ya os hablaré de ello en otro post) .
Como os decía, visualizarse me acabó la mítica prueba se puede transformar en una realidad, y ahora que vuelvo a encontrarme en forma, es el momento de empezar a pensar en empezar a prepararla (será cuestión precisamente de empezar entonces? ) .
Aunque la del 2008 la intenté en Zaragoza, por una cuestión de fechas (tenía vacaciones), mi idea es probar en casa, Barcelona y Tarragona son las dos ciudades candidatas.
Y entre las dos opciones, al final me quedaré con Tarragona, primero porque es mi ciudad de nacimiento, y porque me encanta, pero también porque sé quien lo organiza, la empresa Running Solutions es de lo mejor que le ha podido pasar en la provincia en materia de deportes.
Después de unas cuantas ediciones participando en distancias más pequeñas, este año volveré con las medias maratones, y sin pensarlo demasiado (si la cosa sale decente), a principios del próximo será hora de hacer la entera, la de verdad, la mítica, la de Filípides.
Como todo lo que intento, no será fácil, pero precisamente de eso se trata, de poner a prueba mi resistencia, de ser resiliente, de volver a mostrar mi mejor virtud que no es otra que la constancia (o al menos eso es lo que quiero pensar …).
Si me emociono sólo de pensar en la posibilidad de cruzar la meta, me imagino cómo debe ser hacerlo!