Lunes… todo preparado para correr en pista otra mañana más, pero al llegar comienza a llover de manera intensa, hoy no tenía cargado el Mighty, que sí es resistente al agua, y el smartphone me daba algo de reparo usarlo entonces.
Tampoco sabía si duraría mucho el temporal, así que me he metido en el gimnasio.
La gran alternativa al running si llueve siempre es el gimnasio.
Y en el gimnasio, lo cierto es que tener una cinta iba muy genial, pero desde que no está tengo que buscar otras opciones, y si he de elegir entre la bicicleta y la elíptica, entonces me quedo con la elíptica, me resulta más cómoda para entrenar.
Es algo muy subjetivo, lo sé, y no va a sustituir ninguna sesión corriendo, pero al menos me va a permitir comenzar la semana a tope de sensaciones, con una hora de cardio, en la que he trabajado diferentes intensidades.
Lo cierto es que ya estoy recargando el Mighty para poder disfrutar de música aunque mañana me hiciera lo mismo, correr bajo la lluvia es una de esas sensaciones fantásticas, pero sin querer comprometer mi teléfono móvil o cualquier otro aparato electrónico que utilice normalmente…