Los dos días de descanso obligado me han sentado genial, me he sentido con fuerzas y ganas de hacer el trayecto Pallaresos-Tarragona (aunque llegando sólo hasta el cementerio).
Me han salido 14 km en una hora justa, no esperaba para hoy un entreno de velocidad, si no de distancia, y he ido muy tranquilo, sin forzar, pero de la misma manera que hay días en los que las cosas no salen, hay otros en los que todo funciona, y hoy ha sido uno de esos días.
He corrido la ida con cortavientos, una temperatura fresca, y a la vuelta, ya con el sol y con las altas temperaturas de esta época, he tenido que quitarme el cortavientos y correr con la camiseta de manga corta.
Para haceros una idea, el ritmo más fuerte ha sido de 3’05’, y el más lento de 4’27», que seguramente ha coincidido con alguna subidita, aunque por lo general el trayecto es bastante plano, con una cuesta pronunciada en la ida.
Estoy feliz, y veo con esperanza poder cubrir mi primer maratón este año, ¿será en septiembre en Zaragoza?, ya veremos si me da tiempo de prepararlo todo para que así sea.