Por fin he vuelto a correr un 10000 después de la lesión de menisco, he tardado algunos meses en conseguirlo, pero finalmente ha salido.
Últimamente ya me estaba quedando con la espinita clavada en los entrenos, tengo la idea de llegar a hacer 10K. de un tirón y ves que no sale, o paras el crono antes de tiempo, y tampoco quiero autoengañarme, necesitaba hacerlos seguidos, sin parones de ningún tipo, y así ha sido.
Cuando vuelves a correr después de una lesión es en cierto modo como volver a empezar, no puedes, y tampoco quieres, comparar con los registros o las sensaciones que tenías antes, pero hoy sí que he comparado, y no ha sido ni mucho menos mi peor tiempo en la distancia, tampoco el mejor.
El viento ha estado haciendo de las suyas, con lo que en algunos momentos me limitaba a mantener el ritmo, esa ha sido mi estrategia, ir de menos a más, pero siempre sin perder ese punto de cordura que evitara cambios bruscos, o en otras palabras, que intentara esprintar cuando faltaba todavía todo por hacer.
Ya llegará, si tiene que llegar, mejorar los tiempos, ahora de momento me conformo con haber acabado en un discreto 46’46» que por cierto, no es la primera vez que me sale un registro similar, y la última vez que hice un 10000 me salió un minuto más lento, con lo que estoy muy satisfecho con el resultado.
Sobre todo las sensaciones, porque lo pasas fatal cuando te lesionas, mentalmente es terrible y tienes que mantenerte fuerte, y cuando regresas siempre tienes el temor de recaer, es necesario abstraerse un poco para conseguir no hacer cosas raras en los entrenos.
Ahora a seguir entrenando para conseguir otros logros, el medio maratón todavía está lejos, pero es cuestión de insistir de ir mirando jornada a jornada y planificar un poco las semanas, esta desde luego la inicio con ganas, motivado y con unas sensaciones brutales, esperemos que acabe igual de bien que comienza.